El 26 de setiembre de este año, 18 millones de Venezolanos acudirán a las urnas para elegir 165 asambleístas, los escaños se dividirán entre oficialistas del PSUV y los de la oposición, aglutinada en la llamada mesa de unidad MUD.
Estamos exactamente a 30 días de la realización del proceso electoral, y el día de ayer, oficialmente, ambas tendencias política iniciaron sus campaña del tramo final con miras a ganar la elección de diputados, congresistas o asambleístas nacionales, como se les llama en Venezuela.
La oposición que a través de su mesa de concentración, agrupa a mas de 20 partidos políticos, en esta tendencia no solo están los Adecos y Copeianos, están también los grupos de derecha y centro derecha, que salieron de las entrañas de estos partidos que hace 10 años se opusieron a Chávez por su inclinación a los dictados de Fidel Castro.
Los disidentes del Chavismo, no se quedan atrás, y le están vendiendo al elector Venezolano de tendencia centro izquierdista, un gobierno Chavista sin Chávez, son los disidentes que están cansados de la aplanadora gobiernista que se ha contagiado de los vicios de la IV cuarta República, en esta posición sobresalen Podemos de Ismael Garcia y el PPT con la figura de Henrry Falcón.
El principal objetivo del Psuv es mantener la hegemonía en la Asamblea Nacional, "necesitamos dos tercios y por eso estamos dispuestos a "arrasar", así lo manifestó el jefe nacional de campaña del Psuv, Aristobulo Isturiz.
El pueblo pa' la asamblea, es el eslogan del Chavismo, la importancia de ganar y mantener la hegemonía de la asamblea nacional es de vital importancia para que el proceso chavista, y evitar a toda costa que este detenga.
Recientes estudios de opinión señalan que la campaña empieza dándole al presidente Chávez 32 y 37%, y a la oposición 40 y 46 por ciento, estos números no están lejos de la realidad, solo basta revisar el día a día de la vida del venezolano, para entender las posibilidades que tiene la oposición de tener mayoría en la Asamblea y las probabilidades cercanas que tiene el oficialismo de perderla.
El desgaste de Chávez, no es un invento del imperio, ni castigo de Dios por pelearse todos los días con la Iglesia Católica, o por decir que Cristo es Socialista; son los hechos concretos los que al Chavismo lo viene alejando en forma permanente del venezolano de a pie.
Hace mas de 10 años, cuando Chávez llegó al poder, en Venezuela habían 3 mil muertos por año a causa de la violencia común, pero las estadísticas oficiales, hoy hablan de un incremento alarmante que llega a mas de 15 mil muertos por año, este hecho concreto, nos hace pensar que la violencia se ha instituido clandestina u oficialmente como políticas de gobierno.
El robo, el asalto, el sicariato, el secuestro, la amenaza contra la vida y la salud, es parte de la vida cotidiana en la sociedad llanera, esto no es un invento, menos un cuento de la oposición o de los escuálidos, como el chavismo le llama a los que no comulgan con sus ideas.
La actitud negativa del gobierno contra la empresa y los empresarios, no asegura estabilidad jurídica para las inversiones, esta situación ha originado un alto al desarrollo y a la creación de nuevos puestos de trabajo, por eso que el desempleo cada día crece a pasos agigantados.
El acosamiento permanente a toda forma de libertad de expresión, a los medios y a los comunicadores sociales, se acentúa con mas fuerza, no solo es la intervención en el accionariado o en los directorios de las empresas, bajo pretextos de deudas con el gobierno, también es la amenaza y la cárcel para quienes osan decirle su verdad al régimen.
El oficialismo dice que la oposición tiene un plan B, y esta opinión es por que ellos a pesar de contar con una maquinaria de activismo político afiatado y bien entrenado, sienten que se han alejado del pueblo, lo cierto es que hoy la oposición se encuentra en una de sus mejores oportunidades para colocar en la asamblea nacional 70 u 80 Asambleistas, en el mejor de los casos.
El PSUV, según sus voceros, tiene en pleno trabajo político a 36 mil patrullas socialistas, esta es una afirmación positiva y se sustenta en la gran cantidad de militantes que trabajan para el estado, en las diferentes reparticiones, en las que están incluidas las famosas misiones y todas las organizaciones estatales vinculadas a los temas sociales, pero que a la hora de votar, no alcanzaran las cifras que necesita Chávez para mantener su mayoría.
Hugo Chávez, a mas de diez años de gobierno, siente que ha entrado a un proceso de franco desgaste, él sabe perfectamente que no tiene un equipo competente en el frente interno como en el externo, por eso es que personalmente se enfrenta a sus contendores nacionales, como a los lideres internacionales que no comparten sus propuestas del comunismo trasnochado.
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